
El ánfora es un tipo de recipiente cerámico realizado a torno que llega a la Península Ibérica a principios del I milenio a.C. en manos de los navegantes fenicios. Su forma fue rápidamente imitada llegando a convertirse en uno de los recipientes más populares para almacenamiento y transporte.
Estas ánforas, fechadas en torno al siglo III a.C., proceden del yacimiento de Los Garciagos, situado en la rica campiña jerezana, uno de los pocos exponentes de asentamientos rurales conocidos en época prerromana.
Comentarios
Publicar un comentario